Por Heidi Castellanos
Municipiosur.com
En diversas regiones de Veracruz, la presencia creciente de niebla y neblina está generando condiciones climáticas peligrosas, especialmente notorias en el sur del estado, lo que representa riesgos significativos en las carreteras debido a la obstrucción de la visibilidad. Oscar Sarracino, enlace regional de la Secretaría de Protección Civil zona Coatzacoalcos, explica que la combinación de temperatura y humedad atmosférica contribuye a la formación de este fenómeno. Destaca que las carreteras presentan condiciones más desafiantes debido a la densa maleza, aumentando la peligrosidad para los conductores. “Todo lo que es la pista, por llamarlo así la Nuevo Teapa- Cosoleacaque, que es una de las más pesadas, la de aquí de Las Matas que también es más pesada porque tenemos mucha maleza, muy peligrosa para las carreteras”, explicó. Ante esta situación, Protección Civil hace un llamado a los automovilistas para que tomen precauciones adicionales. David Esponda, director de Protección Civil de Coatzacoalcos, destaca los riesgos asociados con la visibilidad reducida y enfatiza la importancia de reducir la velocidad, mantener distancia segura y utilizar luces, incluyendo las de emergencia, según sea necesario. Además, subraya la importancia del cinturón de seguridad. “Los riesgos que implica son en cuanto a la visibilidad que se puede generar y es importante hacerlo notar porque los conductores toman pocas precauciones al momento de conducir sus vehículos y una de las precauciones primarias que debemos tener es manejar con las luces encendidas. Otra cosa es manejar a la defensiva, ir pendiente de como vienen manejando los demás operadores, para evitar que alguien pueda ocasionarnos a nosotros un accidente, manejar con el cinturón de seguridad e ir muy atento a cómo se están desarrollando las cosas en las vías de circulación”, refirió. Expertos señalan que la niebla, más densa, afecta la visibilidad a corta distancia, mientras que la neblina, más ligera, permite ver a más de mil metros. A pesar de estas diferencias, ambos fenómenos pueden tener impactos significativos en la conducción y la seguridad vial.
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