Fluvio César Martínez, nos cuenta la crisis e historia de los artesanos de Zaragoza

Por Fluvio César Martínez

Municipiosur.com

«La verdad sí nos está yendo muy mal, al grado de que hemos batallado incluso para comer, porque nosotros vivimos de esto», es la realidad que vive don Erasto Antonio Candelario, un artesano del municipio de Zaragoza al sur de Veracruz, a quien la contingencia sanitaria le afectó en gran medida.
La falta de exposiciones culturales y artesanales derivado del confinamiento por el covid-19, mermó los ingresos de los artesanos veracruzanos, como don Erasto.
Erasto señaló que la situación es tan grave para ellos, que desde marzo a la fecha sólo ha vendido dos piezas a personas que han acudido hasta dicho municipio, donde instaló su taller de trabajo que comparte con su familia.
«Para nosotros es muy complicado, porque se nos cerraron todas las puertas y la gente dejó de visitarnos en este lugar y comprarnos lo que hacemos y todo eso nos llevó a una situación económica muy complicada»
DE LOS POCOS ARTESANOS QUE TRABAJAN LA JÍCARA
«Xumuapan» es el nombre de su proyecto familiar. Trabaja con jícara, caña y coco seco, que con su creatividad los convierte en figuras de gran utilidad y excelente calidad en sus acabados con grecas y grifos que muestran su forma de ver la vida.
«Hacemos jarras, tazas, vasijas con tapa, alhajeros, floreros, saleros y una gran variedad de lo que nuestra creatividad nos pueda dar para seguir inventando más objetos que puedan ser de utilidad para estos espacios y también en oficinas», indicó.
Don Erasto tenía planeado echar a andar un proyecto turístico artesanal en este municipio en el mes de junio, mismo que se fue abajo por la pandemia del coronavirus
“La idea era promover a todos los artesanos de Zaragoza, por últimamente ya nos estaba visitando más gente y pues nos compraban algo, eso ayudaba a mantenernos, igual otros artesanos de aquí de Zaragoza, pero pues no nos desesperamos, trataremos de concretarlo en cuanto esto se acabe», afirmó.
Durante varias semanas, tuvo que cerrar su taller pues a pesar de que el municipio de Zaragoza de mantiene con 3 contagios y cero defunciones por coronavirus, las autoridades municipales le informaron que su negocio no era esencial.
«De ahí nos pusimos a vender tamales de masa cocida y pues con eso tratamos de subsistir unas semanas», expresó.
PROMUEVE SUS ARTÍCULOS EN REDES SOCIALES
A pesar de que la materia prima la siembra por cuenta propia, algunos insumos los tiene que comprar, lo cual se ha complicado ante la falta de venta, pues mantienen un sistema de circulación económica, es decir, dependiendo cuanto venda es lo que compra de insumos para elaborar más artesanías.
«Tenemos productos aun, y necesitamos venderlos para reactivar nuestra producción eso es lo que seguimos haciendo y pues por otro lado seguir invitando por este espacio a la gente que nos conoce a que nos visite», insisitó.
Al igual que don Erasto, decenas de artesanos veracruzanos la están pasando mal a causa de esta contingencia. Por lo que ha optado por promover sus piezas en redes sociales, donde incluso lanzo un video promocional para darse a conocer y la ubicación de su taller, donde cuenta con una pequeña exposición.
«Pues ahí vamos, ahorita ya abrimos y pues a los que nos conocen les decimos que nos vengan a visitar con medidas sanitarias, o que elijan un producto y se los enviamos para que no tengan que venir, como se les haga más fácil», explicó.
Asegura que nada, ni siquiera una pandemia lo va detener y seguirá trabajando para transmitir el orgullo de sus antepasados a través del arte en jícara.
Es herencia de nuestros pasados y nuestra esencia, por eso seguiremos trabajando con mis familia y elaborando más figuras», finalizó.