Una persona dispersa se llena de emociones negativas que le llevan a retroceder y postergar sus actividades
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Agencias
Ser una persona dispersa va más allá de no querer hacer las cosas, de acuerdo con los expertos en salud mental tiene mucho que ver con problemas emocionales.
Los psicólogos explican que la procrastinación ocurre con mayor frecuencia en las personas que tienen poca tolerancia a la angustia, por lo que postergan sus labores.
Así, una vez que están por empezar con sus deberes, se llenan de emociones negativas que los llevan a retroceder y postergan sus actividades.
Los problemas que pueden ocasionar procrastinación son varias, y los expertos te ayudan a detectar estos momentos para saber cómo reaccionar a ello.
Así es como la procrastinación puede formar parte de tu vida
Una de las razones por las que la dispersión te gana puede ser la constante toma de decisiones, principalmente cuando se trata de pequeños detalles.
También la falta de orden o planeación pertinente hacen que muchas personas se tornen dispersas, ya que tienen dificultades para romper con la rutina.
La procrastinación también se hace presente en pareja establecidas que prefieren postergar ciertas tareas, lo que eventualmente les provoca problemas importantes.
En el caso de las personas que padecen depresión, también forma parte de su rutina la dispersión, pues no encuentran nada demasiado divertido y todo puede parecerles demasiado complejo.
En todos los casos, es importante evaluar lo que significaría realizar tal actividad a nivel personal, profesional o familiar. Encontrar estrategias cuando algo parece demasiado complicado podría ayudar a evitar la procrastinación.